Ya está aquí el verano, y con él una serie de
riesgos para los teléfonos móviles. Aca te traemos siete tips para poder disfrutar el calor y que tu smartphone no lo sufra.
En estas fechas, solo hay un pensamiento común:
descansar de la rutina y tener tiempo libre para hacer lo que se quiera. Un
momento de desconexión del trabajo, del día a día pero sin
dejar de lado al teléfono móvil. Habrá más tiempo incluso para colgar fotos, chatear con los
amigos olvidados, dar envidia en las redes sociales y hacerse ‘selfis’ sin
parar.
El uso generalizado de los dispositivos móviles en las tareas cotidianas trae como consecuencia que información tan personal como datos bancarios, fotografías, mensajes, contactos, correos electrónicos y una larga lista de información privada se traslade de un lugar a otro en los bolsillos.Es decir, la mayoría de personas se lleva su teléfono a la playa o piscina. Lugares poco amigables para los teléfonos. Y es que el agua, el sol, la arena e incluso el viento pueden provocar daños -en muchos casos irreparables- en los dispositivos.
Por esto, es importante tener en cuenta estas recomendaciones para evitar que el móvil se dé un buen chapuzón o se ‘queme’ con tanto sol:
El uso generalizado de los dispositivos móviles en las tareas cotidianas trae como consecuencia que información tan personal como datos bancarios, fotografías, mensajes, contactos, correos electrónicos y una larga lista de información privada se traslade de un lugar a otro en los bolsillos.Es decir, la mayoría de personas se lleva su teléfono a la playa o piscina. Lugares poco amigables para los teléfonos. Y es que el agua, el sol, la arena e incluso el viento pueden provocar daños -en muchos casos irreparables- en los dispositivos.
Por esto, es importante tener en cuenta estas recomendaciones para evitar que el móvil se dé un buen chapuzón o se ‘queme’ con tanto sol:
1) El sol no broncea al ‘smarthone’: De hecho, el exceso puede dañar la pantalla y el interior del móvil. Por tanto, si es necesario llevarlo encima (dejarlo en casa un rato no está de más) es recomendable taparlo. Ya sea metiéndolo en alguna mochila que proteja bien del sol y del calor, o evitando que le dé la luz del sol durante cierto tiempo.
2) La crema solar, solo para las personas: Tampoco es de lo más dañino, pero si se queda una capa gruesa en
la pantalla táctil esta puede fallar. Con limpiarlo es suficiente, además es
complicado que la crema se meta en el teléfono. Pero no por ello hay que
asegurarse de tener las manos lo más limpias que se puedan e incluso evitar que
los dedos tengan arena que pueda dañar la pantalla.
3) Solo pocos móviles se llevan bien con
el agua: Ya existen móviles resistentes
al líquido elemento. Se pueden mojar pero ojo no resisten a un baño en agua salada. Y atención también al cloro de las piscinas. Es decir, los móviles
soportan caídas al agua, no baños largos. De hecho, las compañías de seguros de
móvil no suelen cubrir este tipo de averías. ¿Qué hacer si se cae al
agua? Este técnico lo explica de forma clara.
4) Ni mucho frío, ni mucho calor: Tan malo es lo uno, como lo otro. Recomendable al 100% llevar el
móvil guardado en una funda que lo cubra por completo. Si se calienta en
exceso, lo mejor es apagarlo y esperar a que se enfríe. Si al volver a
encenderlo no responde, habrá que acudir a un servicio técnico. En principio,
el calor no tendría que ser una causa muy dañina para el terminal, aunque las
consecuencias para la batería pueden ser fatales.
5) El polvo y la arena entran por todos
los rincones: Les pasa a las personas, llegar de
la playa supone tener arena en cualquier rincón del cuerpo. Con los móviles es
igual. Se pueden meter al interior del mecanismo y provocar fallos importantes.
Además, incluso pueden rallar la pantalla. Solución, una buena funda.
6) Atención a la batería: Darle cargas cuando se necesiten, no abusar del tiempo de carga ni
esperar a la descarga total. Es decir, si se trata el móvil correctamente en el
día a día, no hay razón para descuidarse en el verano.
7) Precauciones ante pérdidas y/o robos: Tener siempre presente
cómo tener localizado el teléfono en caso de
pérdida. En este punto, también resulta
importante tener un buen sistema de bloqueo de pantalla y no perder de
vista el código IMEI, ese DNI del teléfono de 15 dígitos.
Es necesario para la denunciar la pérdida.
8) Por último, tener una copia de
seguridad de todo el contenido del
teléfono es igualmente importante. La agenda, fotos, vídeos y demás datos
personales almacenados son material muy sensible en malas manos. En móviles
Android, se realiza mediante una cuenta de Google; con el iPhone, habrá que acudir a una cuenta en iCloud.